2023: Año de Francisco Villa, el revolucionario del pueblo
18/08/2023
Nota - T-MEC
“Yo creo que va a ser muy importante porque no es un asunto nada más de México, es un asunto que les va a ayudar a los consumidores de Estados Unidos y de todo el mundo. (…) Es una muy buena oportunidad para revisar esto. Nosotros no vamos a permitir que se utilice maíz transgénico para la alimentación del pueblo de México, primero la salud”, subrayó.
En conferencia de prensa matutina, el mandatario señaló que México difiere de representantes de Estados Unidos, quienes consideran que podrían ser incompatibles con el T-MEC ciertas disposiciones del Decreto por el que se establecen diversas acciones en materia de glifosato y maíz genéticamente modificado, publicado en el Diario Oficial de la Federación el 13 febrero de 2023.
Actualmente, precisó, en México el maíz blanco no transgénico es destinado al consumo humano, mientras que el amarillo importado se destina al forraje en la crianza de animales de corral.
“Es algo yo creo importante el que hayan solicitado los del gobierno de Estados Unidos ir a un panel para dirimir, para resolver lo del maíz transgénico. (…) Entonces, qué bien que están ahora impugnando un decreto nuestro para que no utilicemos ese maíz en el consumo humano, porque esto nos va a permitir en este panel presentar pruebas y hacer propuestas”, abundó.
El planteamiento de México, dijo, es conformar un grupo de investigadores con el propósito de conocer a “ciencia cierta si se trata de maíz transgénico y si causa daño o no a la salud; nosotros sostenemos que sí”.
El mandatario sostuvo que el país no está violando el T-MEC y, cuando hay diferencias entre México, Estados Unidos y Canadá, los paneles son una solución estipulada y encaminada a brindar certidumbre a todas las partes.
Por parte del Gobierno de México, participarán en el panel las secretarías de Economía y de Agricultura y Desarrollo Rural, así como el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt).
El jefe del Ejecutivo explicó que algunos empresarios estadounidenses presionan a legisladoras y legisladores de su país para consolidar propósitos comerciales que no benefician a la población.
“Las grandes corporaciones les dan dinero para sus campañas a diputados, a senadores, a presidentes, entonces esos diputados, esos senadores —es un sistema que considero está mal, pero así son sus leyes y se tienen que respetar— son como sus empleados, más al servicio de ellos que del pueblo, que de los ciudadanos, es toda una distorsión”, acotó.