Fue una lucha de muchos años de mujeres y del movimiento democrático, y ahora lo que tenemos que tomar como objetivo es el consolidar la transformación del país, consumar la transformación que hemos iniciado. Y esto tiene que ver con las libertades, tenemos que hacer valer las libertades en sentido amplio, que no haya autoritarismo, que podamos expresarnos, manifestarnos, con absoluta libertad; vivir en un país plenamente libre.

 

También tenemos que consolidar el principio y el propósito de justicia, lo mismo, en sentido amplio, sobre todo justicia social, el que sigamos luchando por la igualdad; el que se combata la monstruosa desigualdad que hoy existe, que todavía existe en nuestro país, donde hay millones que tienen poco, muchos que tienen poco y pocos que tienen mucho. Eso es un propósito, luchar por la igualdad o en contra de la desigualdad, y esto tiene que ver con hombres y con mujeres, lo mismo que las libertades.

Y también tenemos que luchar por hacer un hábito la democracia, una forma de vida. Todavía tenemos que consolidar la democracia porque, así como se les negaba la participación política a las mujeres y se tardó en conseguir el derecho del voto de las mujeres, así también tardó en llegar la democracia en nuestro país, apenas está dando los primeros pasos la democracia. Siglos de imposiciones, todo el tiempo de dominio colonial sin democracia. México independiente, sí, pero también sin democracia.

Después de la Revolución, aun cuando tuvimos el presidente con más vocación democrática que ha habido en México, Francisco I. Madero, Apóstol de la Democracia, después de su asesinato cobarde, e incluso después de la Revolución, siguió sin haber democracia.

Es hasta hace poco que se alcanzó; primero, con una alternancia que buscaba engañar con lo que se conoce como gatopardismo, eso que consiste en que las cosas en apariencia cambian para seguir igual, porque querían una alternancia en donde quedara uno u otro partido que iba a significar, en esencia, lo mismo, no importaba quien estuviese porque iba a continuar la misma política de injusticia, de opresión, de privilegios.

Nada más que surgió este movimiento de todas, de todos, y ya hay una democracia auténtica, verdadera, pero se requiere consolidar esta democracia, porque los que se sienten afectados porque ya no son los dueños de México, pues van a querer regresar por sus fueros, y no para actuar de manera democrática, sino para imponer lo que había, una oligarquía.

La democracia es el gobierno del pueblo, para el pueblo, con el pueblo. Demos es pueblo, kratos es poder, es el poder del pueblo. Eso no había, era una oligarquía, que es el gobierno de las minorías, el gobierno de los ricos; eso es lo que ellos añoran, quieren regresar por sus fueros para imponer de nuevo esta oligarquía.

Entonces, necesitamos consolidar la democracia, y no sólo la democracia representativa, sino la democracia participativa, que no sea nada más el que nos elijan cada tres, cada seis años, sino que se gobierne con el pueblo, que se mande obedeciendo, y eso tiene que quedar, repito, como un hábito, eso necesitamos consolidarlo.

Y, por último, hacer valer que somos un país libre, independiente y soberano, que no somos colonia ni somos protectorado de ningún gobierno extranjero. Hemos avanzado en eso, pero hace falta todavía más, porque estaban mal acostumbrados y se metían hasta la cocina sin pedir permiso, muy ventajosos.

Entonces, tenemos ahora que consolidar nuestra independencia y hacer valer nuestra soberanía.

De modo que ya alcanzamos el que sea una realidad el feminismo, ahora tenemos esas otras tareas por delante.

Todos hemos contribuido —desde luego, ustedes— a que las mujeres estén en la conducción de todo el proceso de transformación de nuestro país.

Hace poco, este fin de semana, estuvimos en unas reuniones con compañeros, compañeras, que trabajan como servidoras, servidores de la nación, y nos reunimos en algunos estados. Ya llevamos 24 estados, nos faltan ocho, pero ya vamos a estar, nos falta nada más Chiapas, Oaxaca, Guerrero; nos falta Sinaloa, Sonora, Chihuahua, Baja California Norte y Baja California Sur, y ya terminamos.

Pero les voy a comentar que son reuniones así, y les digo: A ver, vamos haciendo una consulta, que levanten la mano las mujeres, ¿no? Bueno, pero está casi como aquí, nos mayoritean por completo.

Entonces, los que están trabajando abajo, las que están trabajando, visitando domicilios en la calle, la mayoría mujeres, son las que están recogiendo los sentimientos de la gente y son las que están entregando los apoyos que por derecho les corresponde a todos los mexicanos.

Bueno, las mujeres, 70 por ciento de los que trabajan en el servicio público son mujeres; los que trabajan en las comunidades, en todos los Programas de Bienestar, 70 por ciento.

¿Y saben cuál es la otra buena noticia?, que la mayoría son jóvenes, o sea, que ya hay relevo generacional.

Y yo les felicito mucho. Y pues amor con amor se paga.

Nada más termino invitándoles. Miren, es una invitación abierta, pero no creo que lleguen los conservadores, porque es conmemorar la expropiación petrolera y eso a ellos no se les da.

Puede ser que se disfracen de feministas, pero estar a favor de la expropiación petrolera no lo creo. O sea, tampoco pueden estar el día 1° de mayo, el Día del Trabajo, porque ellos no están de acuerdo en eso; ni el 15 de mayo, el Día del Maestro y de la Maestra, porque ellos nunca han estado a favor de la educación pública.

Entonces, vamos nosotros a estarnos encontrando y recordando todas estas fechas históricas, porque la historia es la maestra de la vida y nosotros sí sabemos de dónde venimos y sí sabemos a dónde vamos.

Muchas gracias, de todo corazón.