2022: Año de Ricardo Flores Magón, precursor de la Revolución Mexicana
27/08/2022
PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Amigas, amigos de la Comisión Federal de Electricidad, trabajadores, mujeres y hombres, dirigentes del sindicato, directivos de la Comisión Federal.
Me da mucho gusto, la verdad, estar con ustedes, porque estamos llevando a cabo una transformación con la participación de nuestro pueblo.
No se podría transformar una realidad de injusticias, de opresión, de corrupción, de privilegios sin el respaldo del pueblo, y también no se podría contar con el respaldo del pueblo si no hay un plan atrevido en beneficio del pueblo.
En nuestra historia ha habido gobernantes de muy buenos sentimientos que han fracasado, aunque son mártires, héroes, y fueron derrotados, en su momento, aunque después trascendieron y, como ya dije, son parte de nuestra historia, porque, aunque eran muy buenos y le tenían un profundo amor al pueblo, no supieron cómo apoyarse en el pueblo para llevar a cabo los cambios, las transformaciones.
Un ejemplo es el del Apóstol de la Democracia, Francisco I. Madero. Él, a pesar de venir de una familia de hacendados, enfrenta a la dictadura porfirista y convoca al pueblo —fíjense el valor de ese hombre— a tomar las armas un 20 de noviembre de 1910, y hasta en el manifiesto pone la hora, a las 6:00 de la tarde, para derrocar el porfiriato.
Y él quería, y ese era su lema, la democracia, sufragio efectivo, voto efectivo, que efectivamente el pueblo elija a sus autoridades, sufragio efectivo, no reelección, porque Porfirio Díaz llevaba 34 años en el poder.
Fíjense, nuestro desdichado país cuánto ha padecido en lo político, tres siglos fuimos colonia de la monarquía española, 300 años. Y se logra la independencia también por dirigentes excepcionales, que esos, con todo respeto, no los tienen en otras partes, Hidalgo, Morelos.
Bueno, se logra la independencia política, 1821, y empezamos como país independiente. El primer presidente de México, Guadalupe Victoria, que gobierna de 1824 a 1828, porque en ese entonces eran cuatro años, no seis.
Sin embargo, ya terminando Guadalupe Victoria, empieza la confrontación de liberales contra conservadores, federalistas contra centralistas, inestabilidad, y eso es aprovechado por un hombre audaz y muy perverso, Antonio López de Santa Anna, y se convierte en el hombre fuerte, toda la primera mitad del siglo IXX, once veces presidente de México, y por él se da un gran zarpazo y nos arrebatan más de la mitad de nuestro territorio.
Bueno, Santa Anna y, luego, Porfirio Díaz, 34 años. México en el sigIo IXX, políticamente hablando, fue país de dos hombres. ¿Cuál democracia?
Primero nos mandaban a los virreyes desde España tres siglos y otro siglo ya como país independiente manejados por dos caudillos militares. Por eso la Revolución y el surgimiento de este hombre bueno que se adelantó a su tiempo, que buscaba que México fuese un país libre y democrático.
Sin embargo, no pudo o no supo cómo apoyarse en el pueblo. En ese entonces la demanda de los campesinos era de que se les devolvieran sus tierras que les habían arrebatado los hacendados. Y al principio se llevaron bien, Madero y Zapata, pero los que rodeaban a Maderose encargaron de dividirlos y no se pudo lograr la alianza para que, haciendo justicia a los campesinos, devolviéndole sus tierras, Madero contara con una base social que lo respaldara.
No se pudo y se quedó en el aire, sin apoyo popular, y por eso los militares más terribles del antiguo régimen lo apresan siendo presidente en Palacio Nacional, lo tienen cinco días detenido en la Intendencia del Palacio Nacional y en una madrugada, a él y al vicepresidente, los sacan y los asesinan de manera vil, cobarde.
Esto nos da mucha tristeza porque estamos hablando de un hombre bueno. Y son de las manchas que no se borran en la historia política de nuestro país, pero al mismo tiempo es una lección, una enseñanza: si queremos transformar, necesitamos apoyarnos en el pueblo, y eso es lo que nosotros estamos haciendo, no sólo para sostener el proyecto de transformación, sino por convicción, por ideales, por principios.
Nosotros no somos ambiciosos vulgares, nosotros luchamos por ideales, por convicciones. Nosotros sostenemos que el poder solo tiene sentido y se convierte en virtud cuando se pone al servicio de los demás. Lo demás, el poder, es parafernalia, fantochería, materialismo, ni siquiera es felicidad, porque ni el poder ni el dinero dan felicidad completa; a lo mejor de manera efímera, transitoria. La verdadera felicidad es estar bien con uno mismo, estar bien con nuestra conciencia y estar bien con el prójimo, esa es la verdadera felicidad.
Entonces, nuestro proyecto se inspira en eso. Son convicciones, pero también conocemos la historia, que es la maestra de la vida. Y nos sirvió también luchar durante muchos años, porque ya tenemos algo de experiencia en el noble oficio de la política.
Por eso, va a avanzando la transformación, la Cuarta Transformación. Fíjense lo importante, ha habido tres: la Independencia, la Reforma, la Revolución y esta es la cuarta, pero esta la estamos haciendo de manera pacífica, sin violencia. Porque los padres de nuestra patria, los que impulsaron las tres grandes transformaciones de México, tuvieron que acudir a las armas, y no porque fuesen ellos violentos, eran pacifistas, nada más que así se presentaron las circunstancias. Hidalgo y Morelos eran sacerdotes, curas buenos, rebeldes, extraordinarios; Juárez también era pacifista;Madero, lo mismo. Sin embargo, tuvieron que tomar esa decisión.
Nosotros estamos llevando a cabo esta transformación sin violencia. Claro, no sin resistencia, hay un grupo reaccionario, así se les llama, a los que se oponen a las transformaciones; se les llama también conservadores, porque quisieran conservar lo que está, no quieren cambiar nada, mantener el status quo, porque así ellos se benefician, conservadores y reaccionarios; pero no ha pasado a mayores, hasta debo de reconocer y agradecerles que se han portado bastante bien, con urbanidad política; insultan a veces y cosas por el estilo, pero no pasa a más.
Y piensan que van a poder manipular al pueblo con el control de los medios de información, con la radio, con la televisión, con los periódicos, ahora con las redes sociales. Ya no, ya eso no funciona, ya el pueblo de México ha despertado, está muy avivado, muy avispado, ya no hay analfabetismo político en nuestro país, ha funcionado lo que nosotros llamamos la revolución de las consciencias, el cambio de mentalidad, que eso es lo más importante.
Porque hay veces que se da enfrentamientos, revoluciones y la gente sigue pensando igual, y ahora de manera pacífica ha cambiado mucho la mentalidad del pueblo.
¿Y qué estamos haciendo? ¿En qué consiste esta Cuarta Transformación?
Es sencillo: es que antes pues todo el gobierno se destinaba a favorecer a los de arriba, el gobierno era como un comité al servicio de una minoría. Imagínense, en un país como el nuestro, con tanta desigualdad económica y social.
¿Cómo es nuestra sociedad?
Desgraciadamente es como una pirámide: en la base millones de campesinos, de obreros, de trabajadores, de gente que vive con muchas necesidades; una clase media no muy grande y en la punta una minoría, la punta de la pirámide, la punta del ser, México tiene una monstruosa desigualdad social; es decir, pocos tienen mucho y muchos tienen poco.
El cambio nuestro no es para expropiarles sus bienes a los de arriba, el cambio nuestro es que ya no se siga apoyando sólo a una minoría, que en México tengamos una verdadera democracia.
¿Qué es la democracia?
Es el gobierno del pueblo para el pueblo, con el pueblo. Demossignifica pueblo, cratos significa poder, la democracia es el poder del pueblo. La oligarquía, que era lo que predominaba es el gobierno de las minorías. Entonces, nosotros queremos que en México haya una auténtica democracia.
¿Y qué estamos haciendo?
Pues, sin quitarle nada a los de arriba, destinar lo que se tiene de presupuesto, que es dinero del pueblo, de abajo hacia arriba, no como era antes de arriba para abajo. Porque hasta habían inventado una seudoteoría, de que había que darles a los de arriba porque, si llovía fuerte arriba, goteaba abajo, como si la riqueza fuese contagiosa o permeable. No, nosotros estamos canalizando todo abajo y eso nos está dando resultados.
Por ejemplo, ¿por qué a pesar de la pandemia pudimos salir adelante, con mucho sufrimiento, porque hubo pérdidas de vidas humanas?, porque no sólo levantamos el sistema de salud, hemos adquirido 240 millones de dosis de vacunas, México es de los 10 países en el mundo con más vacunación contra el COVID, y eso nos protegió, pero no solo fue eso, es que ya traíamos los programas de Bienestar: la pensión para el adulto mayor, la pensión para personas con discapacidad, 11 millones de becas para estudiantes.
Programas como Sembrando Vida. ¿Ustedes saben que hay casi 500 mil campesinos sembradores que están cultivando sus parcelas, pequeñas propiedades o ejidos, sus tierras, y se le paga un jornal equivalente a un salario mínimo?
¿Cuánto estamos plantando de árboles frutales y maderables en el país?
Más de un millón de hectáreas.
¿Cuánto significa eso en inversión, mantener a cerca de 500 mil jornaleros, ayudándolos para que cultiven su tierra en más de un millón de hectáreas?
Treinta mil millones de pesos al año, como mil 500 millones de dólares. No hay en ningún país del mundo, ni en el país vecino de Estados Unidos, un programa así de reforestación. Y no es crédito.
Y aquí podría yo hablarles de muchos otros programas sociales. Bueno, todo esto es lo que nos ha ayudado mucho a enfrentar la crisis, que ahora se precipitó con la guerra de Rusia con Ucrania.
Pero miren lo que es gobernar para el pueblo y para la nación. Cuando llegamos dijimos: No va a aumentar el precio de las gasolinas, del diésel, de la luz, y lo hemos cumplido, ya casi cuatro años. Dijimos incluso: No va a aumentar en términos reales.
¿Qué significa esto?
Que sí aumenta de acuerdo a la inflación. Bueno, pues ni siquiera ha habido ese aumento, se ha quedado abajo el pago del servicio de luz y el costo de las gasolinas y del diésel.
¿Qué hicimos desde que llegamos??
Levantar a Pemex, rescatar a la Comisión Federal de Electricidad, sin perder tiempo. En Pemex ya el año que viene vamos a ser autosuficientes, ya no vamos a comprar la gasolina y el diésel en el extranjero, se va a producir toda la gasolina en México y esto va a garantizar que no aumenten los precios.
Y no tengo mucho tiempo, además ando un poco afónico, para hablar más, pero decirles que ustedes nos han ayudado mucho, nos han apoyado para el rescate de la industria eléctrica.
Así como hablaba yo de Madero, no hay que olvidar al general Cárdenas, que fue el creador de la CFE, un buen presidente.
Y no olvidar a otro buen presidente, Adolfo López Mateos, que fue el que nacionalizó la industria eléctrica, por lo que aquí se dijo, porque imagínese si las empresas particulares manejan el mercado eléctrico, ¿a dónde va a haber servicio?, pues donde hay dinero, donde la gente puede pagar por el servicio.
Cuando se nacionaliza la industria eléctrica se empieza a electrificartodo el país y del 50 por ciento que se tenía electrificado, ahora el 99.6 por ciento de la población tiene el servicio de energía eléctrica, porque es una función del Estado.
¿Ustedes creen que una empresa particular…? Iberdrola, una empresa española, que eran como los dueños de México, fíjense lo que nos hicieron, una vez vino a hablar con nosotros el presidente del consejo de Iberdrola, estuvimos con el licenciado Bartlett, y le dijimos: Ya cambió esto, ya sonó la alarma, sonó la campana y ya no pueden seguir con lo mismo. ‘No, pero que nosotros tenemos contratos’ y que debemos de mantener la preferencia en el despachoy el llamado autoabasto. Si le seguíamos con esa política, no exagero, no iba a aguantar la Comisión Federal ni este sexenio, lo iban a quebrar por completo, porque le estaban quitando todo.
Ni siquiera había condiciones de igualdad, no es que se les diera a la Comisión Federal de Electricidad las mismas ventajas que Iberdrola, no, Iberdrola mandaba y tenía subordinada a una empresa pública, histórica, como la Comisión Federal de Electricidad.
Entonces, ya cuando me colmó el plato, le dije: Miren, ya olvídense de lo que ustedes representan aquí en México. Y me va a llevar tiempo explicarle la historia de la Comisión Federal de Electricidad, que es una empresa pública, que nosotros tenemos que defender, es nuestra obligación, nada más le quiero decir que ustedes nos ofendieron, porque no sólo sacaron esos contratos jugosos de ganancias extraordinarias, no sólo eso, sino para mostrar que ustedes mandan, porque pensaban que México era tierra de conquista, se llevaron a trabajar a su empresa al presidente de México, Felipe Calderón, a trabajar como empleado, y eso es una ofensa para los mexicanos, eso nunca más.
Porque está bien —hay un dicho popular, que nada más no lo voy a repetir porque, si no esa va a ser… no, esa va a ser la nota mañana, no— pero ustedes ya saben, está bien, o sea, que estás abusando, pero no lo presumas, o sea, no encima de que te estás imponiendo, todavía actúes con prepotencia, no nos ofendas, no nos humilles.
Pero esa era la mentalidad. Bueno, pues ya esto ya cambió, ahora estamos rescatando a la Comisión Federal de Electricidad, ya hay una nueva ley. Está prohibido, los abogados, lo voy a repetir, le llaman fraude legal al llamado autoabasto, eso ya se terminó. Aquí nada más va a abastecer de energía eléctrica la Comisión Federal de Electricidad.
Y sí, competencia, sí competencia, pero en igualdad de condiciones. Imagínense, yo soy de Tabasco, allá mi tierra, mi agua, allá en el Grijalva, así como aquí en Nayarit hay cuatro hidroeléctricas en el Grijalva, y con los cambios legales del modelo neoliberal no las dejan turbinar, porque no despachan la energía; si tienen cuatro o seis turbinas, si acaso una turbina o cuatro o seis horas al día, porque no les permiten.
¿Y por qué no?
Porque estos señores decidieron que la energía que se produce con agua no es energía limpia, no es renovable, imagínense eso.
Claro que fue un abuso todo lo que hicieron y ahora estamos corrigiendo esos excesos. Y sí queremos la competencia, pero en igualdad de condiciones. No se va a sacrificar a la Comisión Federal de Electricidad, esta empresa la vamos a dejar bien consolidada.
Estaba yo hablando ahora con el licenciado Bartlett, porque las líneas de fibra óptica… Fíjense, hubo un gobierno, con Fox, se construyeron las líneas de fibra óptica, se pagaron con dinero del presupuesto, que es dinero del pueblo, y al siguiente sexenio se entregaron dos líneas de fibra óptica a Telefónica con otra empresa mexicana y, como lo mencionó aquí el licenciado Bartlett, ni siquiera las utilizaron para comunicar con internet y con telefonía celular el país.
No vamos a expropiar nada, ya se dieron esos contratos, se van a respetar, porque nosotros queremos llevar a cabo también los cambios por la vía legal, con un auténtico Estado de derecho, al margen de la ley nada y por encima de la ley nadie, un verdadero Estado de derecho, no un Estado de chueco, como era antes o de cohecho, pero sí vamos a cuidar, antes de que terminemos voy a procurar buscar el mecanismo legal más adecuado para que ya no se privatice nada de la Comisión Federal de Electricidad.
Y decirles que nos van a ayudar mucho con estas antenas del periodo anterior, del periodo neoliberal. Es la creación de una empresa que se llama Altán, que se creó con inversión privada, pero también todo era truculento: inversión privada, pero con créditos de la banca de desarrollo, o sea, de México, nosotros les dábamos los créditos antes y además, si iban a construir algo, les devolvían los impuestos, les devolvían el IVA, negocios redondos.
Bueno, ¿qué pasó con Altán? Fracasó. Que siempre hablan, ¿no?, de que son muy malos administradores los de las empresas públicas, que son muy buenos los administradores de las empresas privadas. Eso es relativo, hay buenos administradores, en el gobierno hay buenos administradores en la iniciativa privada y hay malos administradores y corruptos, tanto en el sector privado como en el sector público.
Entonces, ¿qué pasó con Altán? Pues, la empresa fracasó, porque los directivos ganaban 500, 800, hasta un millón de pesos mensuales. Entonces, ¿qué empresa va a aguantar así?
Claro, la mayoría extranjeros, que ganaban todo ese dinero. Pues fracasó Altán. Para que tengan una idea, Altán es como la empresa de transmisión, ustedes que están en la comisión federal, es la que pone el tendido de la fibra óptica, no puede distribuir, es la empresa mayorista. Llegó al 70 por ciento, es decir, tenemos una cobertura del 70 por ciento, pero ya en la distribución ya solo está Altán, como Telmex y otras empresas, en las ciudades, en los pueblos no hay esta cobertura.
Y fracasa Altán y nos deja una deuda a la banca de desarrollo; entonces, intervenimos porque necesitábamos esa infraestructura del 70 por ciento, y ahora ya esa empresa ya es de la nación porque tenemos el 61 por ciento de las acciones.
No estamos partiendo de cero, tenemos ese 70 por ciento. Ahora, con satélite, fibra óptica y con las antenas tenemos que ampliar la cobertura.
¿Y con quién vamos a hacer esto que nos falta para llegar a los pueblos más apartados, marginados?
Y sí son marginados, licenciado Bartlett, porque decía en el concepto de marginación, sí son marginados de los beneficios del desarrollo. No es que sean marginados del desarrollo, no; todo el pueblo de México participa, contribuye en el desarrollo, nada más que no todo el pueblo se beneficia del desarrollo, son marginados de los beneficios del desarrollo.
Entonces, ahora vamos a llevarles el internet. Ya saben ustedes lo que va a significar para la educación, para la salud. Y ustedes se van a quedar con una gran satisfacción, como todos, de que así como sus antepasados electrificaron a México a ustedes les tocó, tienen la dicha enorme de poder decir nosotros fuimos los que llevamos el internet a todos los pueblos de México.
¿Se puede o no se puede?
VOCES A CORO: ¡Sí!
PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: ¡Eso es!
Y muchas gracias por todo este apoyo, también a los dirigentes sindicales.
Ayer ya hablaba yo de la historia cuando estaba yo en la universidad, que estábamos nosotros en el movimiento democratizador del Sindicato de Electricistas, 1973, fíjense, marchando ahí por la Ciudad de México, por el centro con un gran dirigente, Rafael Galván.
Algunos de ustedes, sus papas, la gente mayor o ustedes de repente busquen este dirigente y su historia. Tenía un movimiento que se llamaba Corriente Democrática del Suterm, fue opositor. Y ahora me da gusto porque ha pasado el tiempo.
Desde luego, me quedó el sabor amargo de que le pegaron al SME. Fíjense que ese sindicato era el más democrático de México, el Sindicato Mexicano de Electricistas. Fue una infamia eso que hicieron de desaparecer esa empresa, despedir 40 mil trabajadores.
Pero ahora con el sindicato de electricistas, con el Suterm, llevamos muy buenas relaciones con los dirigentes, y ellos han entendido, porque además así pensamos, no se trata aquí de banderías partidistas, aquí se trata de servir al pueblo y en el caso de ellos de representarles a ustedes como lo merecen, con mucho decoro, con mucha dignidad.
Y yo agradezco todo lo que hacen diariamente, porque no es cualquier cosa, no son tortas ahogadas o tamalitos de chipilín mantener el servicio de energía eléctrica en todo México y enfrentar huracanes y que a más tardar en una semana ya está restablecido el servicio por ustedes.
No es así ¿eh?, en otras partes. Tampoco se vayan a creer mucho, pero cuando hubo la helada en Estados Unidos, en Texas, tardaron más de un mes para normalizar la situación de la falta de energía eléctrica, y aquí resolvimos en una semana con ustedes.
De eso, lo mínimo, no despidos; al contrario, se van a crear más fuentes de trabajo porque se le está dando su lugar a la Comisión Federal de Electricidad.
No se van a cerrar plantas, como era el propósito de la política privatizadora, ir cerrando plantas de generación para dejarle el mercado a los particulares, no, vamos ahora a la competencia. El mercado de la electricidad tiene que estar también a disposición de la Comisión Federal de Electricidad. No es arrebatarle el mercado con triquiñuelas, no, eso ya se terminó.
Entonces, no hay despidos, va a haber más empleos, nunca el salario se va a quedar por debajo de la inflación, los aumentos siempre van a estar por arriba de la inflación, se van a mantener las prestaciones y no se va a mutilar el contrato colectivo.
No iba yo a hablar mucho y me piqué. Pero ya ahora sí ya termino. Me da muchísimo gusto estar con ustedes. ¿Qué les parece si nos vamos, nos volvemos a encontrar aquí mismo, cuando ya tengamos las antenas y podamos decir todos ‘misión cumplida’? ¿Les parece?
Muchas gracias.
MODERADORA: Les solicitamos guardar el debido respeto para entonar nuestro Himno Nacional Mexicano.
(HIMNO NACIONAL MEXICANO)
MODERADORA: De esta manera concluye este evento, se despide de ustedes el presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, licenciado Andrés Manuel López Obrador. Agradecemos a ustedes su amable asistencia, deseándoles que pasen un excelente día. Muchas gracias.