2022: Año de Ricardo Flores Magón, precursor de la Revolución Mexicana
PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Amigas, amigas de Rosamorada:
Me da mucho gusto estar de nuevo en este municipio. Y estoy muy contento porque estamos iniciando el proceso de modernización del sistema de salud pública en nuestro país.
Cuando llegamos al gobierno era una de mis prioridades el garantizar el derecho a la salud porque, a diferencia de lo que piensan los neoliberales o neoporfiristas, que la educación, según ellos, y la salud son privilegios, para nosotros la educación, la salud son derechos.
Ellos pusieron al mercado la educación y la salud. En el caso de la educación, impedían que los jóvenes pudieran estudiar, inventaron lo de los exámenes de admisión para justificar el rechazo a miles de jóvenes que querían estudiar en las universidades públicas.
Siempre era lo mismo: ‘No pasaron el examen’. Y eso, pues no es cierto; no es que no pasaran el examen, es que no había cupo, no había espacio, porque lo que querían era que el que se enfermara tuviese que pagar la atención médica y los medicamentos. Eso es la privatización, eso es el neoliberalismo.
Ahora, por ejemplo, en el caso de la salud resulta que, por esa política, aunque respeto el punto de vista de otras personas, yo sostengo y puedo probar que no tenemos los médicos en México que necesitamos.
INTERVENCIÓN: ¡Claro que sí los tenemos!
PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Por eso. Respeto su punto de vista, pero no lo comparto. No tenemos médicos suficientes y, lo más urgente, no tenemos especialistas.
Conseguir pediatras para venir a trabajar a Rosamorada, cualquier pueblo, cualquier municipio, es muy difícil porque, con razón, los médicos buscan estar en las ciudades para que sus hijos puedan tener acceso a las escuelas, a mejores condiciones de vida, y es muy difícil que los especialistas puedan ir a trabajar a las comunidades más apartadas.
Por eso, desde el principio dijimos: Ese es el reto, el desafío, cómo levantamos el sistema de salud que está en los suelos, porque lo que había era una gran simulación.
Eso que llamaban Seguro Popular, como aquí se ha dicho, ni era seguro ni era popular, porque se enviaba el dinero a los gobiernos estatales y se usaba ese presupuesto con otros fines, o se lo robaban.
¿Saben cuánto compraba el gobierno en medicinas?
Cien mil millones de pesos sólo a 10 empresas distribuidoras, y tres de esas empresas distribuidoras vendían 65 mil millones de pesos al año al gobierno.
¿Y quiénes eran los dueños de esas empresas distribuidoras, porque ni siquiera eran laboratorios?
Puro político corrupto.
Por eso nos ha costado cumplir con el compromiso de que tengamos un sistema de salud de calidad, universal, es decir, que se garantice lo que establece y está convertido en letra muerta, el artículo 4º de la Constitución: el derecho del pueblo a la salud.
Ya íbamos a iniciar a levantar el sistema de salud, recorrí inclusive al inicio de mi gobierno, 80 hospitales del IMSS-Bienestar y en eso nos llega la pandemia y tuvimos que echar a andar un plan de urgencia para tener médicos, equipos, vacunas y salvar vidas.
Pero afortunadamente, ahora que ya son menos los contagios hemos decidido ahora regresar al plan original y hemos hecho el compromiso de dejar, antes de que termine, mi gobierno un sistema de salud pública de primera. Ese es mi compromiso y lo voy a cumplir, como he cumplido todos los compromisos.
Y ya empezamos aquí en Nayarit, y desde luego con protestas, porque esto es natural. La democracia tiene que garantizar el derecho a disentir. No podemos, no podemos hacer algo sin consultar a la gente, y lo vamos a hacer.
Pero yo les comento a ustedes, nada más en términos, así, muy generales, primero, que les van a atender, primero.
Y lo segundo…
INTERVENCIÓN: (inaudible)
PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Por eso. Pero es mi palabra.
Y lo segundo que quiero que, pues se entienda, es que aquí había, en Nayarit…
INTERVENCIÓN: (inaudible)
PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: No, no hay ningún problema, no me afecta en nada.
Aquí había como 800 trabajadores de la salud, en Nayarit que estaban trabajando de eventuales y llevaban mucho tiempo. Bueno, ¿Cuántos de esos 800 ya se han basificado? Alrededor de 700, de 800. Nos faltan como 100.
En el caso de los compañeros, compañeras, que están protestando, según lo que me expresaron ayer, son alrededor de 70. Entonces, ya llevamos un buen camino. Y vamos a seguir, vamos a lograr el propósito de que tengamos un buen sistema de salud para población sin seguridad social, población abierta, es decir, el que no tiene Seguro, el que no tiene Issste, el que no tiene dinero para contratar un médico particular o ir a una clínica privada.
¿Cuántos mexicanos están en esta situación?
La mitad de nuestro pueblo no tiene seguridad social.
Entonces, ¿qué es lo queremos?
Que esos mexicanos puedan tener garantizado el derecho a la salud; que, si se enferman, puedan venir aquí, al hospital, y ser atendidos, y que estén bien los equipos y que haya especialistas, y que se les entreguen todos sus medicamentos, y todo de manera gratuita. Eso es lo que vamos a lograr.
En el caso de las instalaciones, rehabilitarlas, mejorarlas, equiparlas, que tengan los equipos más avanzados. Me dio gusto ahora, por ejemplo, aquí en Rosamorada ya ver que hay un equipo para las atenciones iniciales a infartados, que no existía.
Equipo e insumos, porque si a alguien le da un infarto sí puede llegar a Tepic en donde hay posibilidad de que le puedan hacer una intervención, ponerle un catéter y salvarle la vida, si aquí es atendido, como lo hacen los médicos especialistas, que ya hay aquí, con los medicamentos para quitarles coágulos y poder llegar a donde hay un cardiólogo especialista, un intervencionista y salvarle la vida. En el caso de los infartos, el tiempo es fundamental.
¿Saben? La principal causa de mortalidad en nuestro país son infartos. Desde luego, el COVID, sí, pero ya ahora, que ya no afortunadamente nos está afectando tanto esa pandemia que tanto dolor nos dejó, ahora vuelve de nuevo a ser la principal causa de mortalidad en México los infartos.
Entonces, queremos que haya los equipos en todos los centros de salud. Desde luego, pensando en que debe de haber medicina preventiva, el primer nivel de atención médica, ya sea un centro de salud, una unidad médica rural y el hospital como este, de segundo nivel.
También, lo que les decía sobre los médicos, tener todos los médicos y todos los especialistas. Y no sólo el turno diurno, sino todos los turnos.
Porque ¿qué había, y todavía sigue esto lamentablemente existiendo?
Los fines de semana no se podía enfermar la gente porque no hay médicos en los centros de salud. Entonces, queremos tener médicos todo el tiempo en centros de salud y en hospitales, ese es el compromiso.
Por eso también he tomado la decisión, y no es responsabilidad ni del doctor Navarro, que le envío aquí un abrazo fraterno, ni del doctor Alcocer ni de Zoé una instrucción que yo di, sabiendo cómo iban a responder nuestros adversarios, los conservadores. Yo tomé la decisión de que contrataran médicos especialistas del extranjero, y van a venir médicos de Cuba.
¿Saben por qué?
Porque la salud no tiene que ver con ideologías, la salud tiene que ver con los derechos humanos. Y si hay que traerlos de Estados Unidos y de Rusia, o de Cuba o de Japón o de Francia, los vamos a tener aquí. Pero lo importante es que tengamos todos los médicos.
Y lo otro es la basificación. ¿Saben cuántos trabajadores heredamos sin basificación, contratados de manera eventual? Como 90 mil trabajadores. Bueno, todos van a ser basificados, todos van a quedar basificados.
Y aquí está el ejemplo, aquí, donde está la protesta. Les decía yo, de 800... Me acaba de decir una compañera doctora, porque recorrimos el hospital y estuvimos ahí dialogando, y ya cuando terminamos me dijo una doctora, me dijo:
—¿Puedo hablar con usted?
—Sí, habla.
—No, pero es que lo quiero hacer en privado.
Ya los que me acompañaban de manera muy amable se retiraron y también ya me dijo en corto: ‘Muchas gracias, porque ya tengo mi base’. Me lo acaban de decir. Pero, además, así es.
Entonces, vamos a basificar a todos los trabajadores de la salud y vamos a mejorar el servicio de salud.
Los que fueron despedidos injustificadamente, injustamente, van a ser reinstalados, restablecidos.
Nada más les digo una cosa: se tiene que ver, nada más revisar qué hacen, porque no queremos gente que cobre sin trabajar. No deben de preocuparse los que están trabajando, tienen su derecho a salvo.
Y vamos a mejorar el sistema de salud, no van a faltar los medicamentos. También ese era otro problema.
Les hablaba yo de las transas que hacían en la compra de medicamentos; ya se acabó. Estamos comprando los medicamentos también en el extranjero para que no falten los medicamentos en centros de salud y en hospitales.
¿Saben que nos ha costado enfrentar una campaña fuertísima? Porque era una verdadera mafia, pues imagínense un negocio de 100 mil millones de pesos al año, estaban metidos hasta dueños de medios de comunicación. Y pensaban que con la campaña de que no había medicamentos usaron, y me dolía muchísimo, hasta a los niños con cáncer, diciendo: ‘No hay medicinas para los niños con cáncer’, y todo. Bueno, una campaña…
Bueno, a Loret de Mola, para ser más claro, le pagaban los que vendían los medicamentos una empresa que vendía medicamentos, y todavía sigue vendiendo medicamentos, relacionada con Roberto Madrazo, que fue gobernador allá, en mi estado, de un partido que no voy a mencionar. Bueno, él tenía como negocio, tiene como negocio la venta de medicinas. Y él le daba dinero a Loret de Mola para desacreditar al gobierno.
Pero saben ustedes, sí, sí, saben ustedes que nosotros nos formamos abajo, a ras de tierra, no somos fifís, no nos formamos arriba, nos formamos abajo, caminando con el pueblo.
Y como decía un gran liberal Ponciano Arriaga: ‘Entre más me golpean, más digno me siento’. Que es un poco lo que comentaba aquí el doctor.
Si no tuviésemos ninguna oposición, si no hubiese reacción… ¿Por qué se habla de los reaccionarios?, porque son los que se oponen a los cambios, a las transformaciones. Entonces, qué bien que hay reaccionarios, ahora los estamos viendo con mucha nitidez, con mucha claridad.
Ahora, por ejemplo, Estados Unidos con Canadá nos están haciendo un reclamo porque queremos rescatar nuestro petróleo y la industria eléctrica nacional. Bueno, aunque parezca increíble, los reaccionarios de México están defendiendo a las empresas extranjeras. En vez de defender a Pemex y a la Comisión Federal de Electricidad, están defendiendo a las empresas petroleras, a las empresas eléctricas del extranjero. Son unos traidores a la patria.
Pero, ¿saben qué?, ¿saben? Nosotros no vamos a dar ni un paso atrás. México es un país independiente, no es colonia de ningún país extranjero; y el presidente de México no es títere, no es pelele de ningún gobierno del exterior. Por eso vamos a defender nuestros derechos. Y le agradecemos mucho al presidente Biden.
¿Cuál es la defensa?
Nada más les voy a recordar a los que están promoviendo esta campaña en contra de Pemex y de la Comisión Federal de Electricidad, lo único que les voy a recordar es: Oiga, el presidente Biden siempre me dice, cuando hablamos, de que el trato entre nosotros se debe dar siempre con un pie de igualdad. Entonces, eso es lo que me dice el presidente Biden, pues eso es lo que voy a hacer valer: la soberanía de México, la independencia de México.
Y vamos a seguir adelante. Muchas gracias a los médicos, mujeres, hombres, a las enfermeras, a todos los trabajadores del sector Salud. ¿Saben? Estamos saliendo adelante de esta crisis por el apoyo de los trabajadores.
Hablaba yo de los electricistas, ellos nos ayudan mucho, por eso voy a defender la Comisión Federal de Electricidad, porque si hay un huracán —y toco madera, bueno, esto es plástico— en Nayarit… Voy a cambiar el ejemplo, en otro lugar, en otro lado. Se caen todas las líneas de transmisión, y en una semana esos trabajadores reestablecen la energía eléctrica, los trabajadores electricistas.
Y lo mismo los trabajadores petroleros, que están levantando la producción de petróleo y ahora la producción de gasolinas y de diésel. Y por eso, aunque no les gusta a los fachos, a los conservadores, la gasolina en México es más barata hoy que en Estados Unidos y que en Europa, por los trabajadores petroleros.
Y lo mismo con los trabajadores de la salud, lo mismo. Tenemos que unirnos entre todos. La labor, la profesión de médico, de enfermera, tiene que ver más que con ninguna otra cosa con el corazón, con el humanismo, con el amor al prójimo.
No se puede ser mercantilista siendo médico o estando trabajando en el sector Salud. Lo fundamental es lo humano, lo que debe de caracterizar al sector Salud de nuestro país es esa frase según la cual nada humano me es ajeno. Lo más importante es la salud del pueblo, el curar. Lo que ustedes sienten cuando están atendiendo a un paciente y le están salvando la vida, esa es una gran satisfacción.
Trabajar en bien de otros, poner el servicio del conocimiento en bien del prójimo, eso es lo más importante, lo que estamos haciendo aquí en Nayarit y en todo el país, para que dentro de dos años nos vamos a sentir todos orgullosos de que ya aquí en Rosamorada va a estar funcionando muy bien todo el sistema de salud, no va a haber falta de médicos, de especialistas, de medicamentos, y la gente va a tener garantizado ese derecho, que tiene que ver con el Estado de bienestar, el que el ser humano tenga protección desde que nace hasta que muere, desde la cuna hasta la tumba, seguridad social.
Que no estemos pensando: ‘Y si nos enfermamos, ¿a dónde vamos a ir?, ¿a qué hospital?, ¿y cómo vamos a pagar la cuenta?, ¿vamos a tener que vender la parcela?, ¿vamos a tener que vender nuestra tierra, nuestra casa?, ¿nos quedamos sin nada, más pobres? Eso no. Tenemos que garantizar el derecho a la salud.
Por eso me da muchísimo gusto estar aquí con ustedes en Rosamorada.
Muchas gracias a todas y a todos.
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