2019, Año del Caudillo del Sur, Emiliano Zapata
El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que el 15 de enero de 2020 estará listo para funcionar en su totalidad el nuevo hospital en Tekax de Álvaro Obregón, Yucatán en beneficio de 250 mil habitantes.
En esta visita de la gira que realiza para dialogar con comunidades indígenas, el mandatario invitó al futuro director del Instituto de Salud para el Bienestar, Juan Ferrer, quien explicó que como parte de la reinauguración, se abrirán 437 plazas nuevas, de las cuales 101 serán para médicos, 167 para enfermeras y 169 para especialistas en pediatría, ginecología, medicina interna, cirugía y anestesiología.
El jefe del Ejecutivo pidió al gobernador, Mauricio Vila, inaugurarlo en su representación en caso de que no pudiera asistir.
Si el próximo martes el Senado de la República avala la creación de esta nueva dependencia, empezará su funcionamiento el 1 de enero.
El encuentro que sostuvo el presidente López Obrador en esta ocasión fue con el pueblo maya peninsular.
En la asamblea se comprometió a apoyar a las personas que le informaron sobre un posible desalojo.
Tras escuchar las demandas del pueblo e informar avances de la entrega de los programas sociales, reafirmó que, si se rescata el campo, se generan empleos bien pagados, si se atiende a los jóvenes y se garantiza el derecho del pueblo a la educación, a la salud y al bienestar, México tendrá paz y tranquilidad.
El mandatario dijo que parte de la estrategia para acabar con la inseguridad y la violencia es que todas las familias pobres del país reciban al menos uno de los apoyos, particularmente los jóvenes para que no sean enganchados en la delincuencia.
“El progreso que se logra con esclavitud, no funciona, no es perdurable, eso genera violencia, intranquilidad. Nosotros queremos que haya justicia, igualdad, amor al prójimo, darle la mano al que se quedó atrás para que se empareje y caminemos todos juntos. Esa es la felicidad”, expresó
Reiteró que en el 2021 ofrecerá disculpas a los pueblos yaquis y maya “que fueron los que más sufrieron durante el exterminio porfirista”.
Sugirió al rey de España y al Papa Francisco que se unan a este acto de humildad por los abusos que se cometieron durante la conquista y la dominación colonial.