2020, Año de Leona Vicario, Benemérita Madre de la Patria
PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Amigas, amigos de Texcoco, del Estado de México:
Me da mucho gusto estar de nuevo en Texcoco, este municipio con tanta cultura y con tanta tradición de lucha por la justicia y por la democracia.
Estamos como testigos de este convenio para que el gobierno municipal, el gobierno del estado que encabeza el gobernador Alfredo del Mazo, el gobierno federal, en particular el Instituto de Salud para el Bienestar, el Insabi, se hagan cargo del funcionamiento de este hospital de primer nivel parra atención a mujeres.
Convenio para la operación del Hospital Materno de Texcoco
En Texcoco, Estado de México, atestiguamos la firma del Convenio para la operación del Hospital Materno de Texcoco, que estará a cargo del Instituto de Salud para el Bienestar. En la epidemia de COVID-19 hemos garantizado la gratuidad a las personas que requieren hospitalización y queremos que así se mantenga el sistema de salud, que se considere un derecho humano fundamental, no como una mercancía.
Publicado por Andrés Manuel López Obrador en Jueves, 25 de junio de 2020
Es una obra importante, necesaria, que se está terminando en lo que corresponde a la infraestructura, a su construcción, falta terminar de equiparlo y lo más importante, los médicos, las enfermeras, el personal que se requiere para la atención de enfermos y de pacientes, de mujeres que van a dar a luz en este hospital.
Tenemos que seguir mejorando todo el sistema de salud pública del país, que se cumpla lo que está escrito en la Constitución, el artículo 4º, el derecho del pueblo a la salud, atención médica, medicamentos gratuitos, que no se cobre en los centros de salud, en los hospitales.
Ahora con la pandemia del COVID-19 está quedando de manifiesto el que se garantiza el derecho a la gratuidad. Todos los pacientes en el Estado de México, en el país que requieren hospitalización, atención médica por la pandemia están recibiendo atención de manera gratuita.
Y eso es lo que queremos se mantenga, no sólo en este tiempo especial y difícil de la pandemia, sino para siempre, que la salud se considere como un derecho humano fundamental, que no se considere como algo mercantil o comercial, que no sea una mercancía, que se pueda atender a todos y que no importe la condición económica o social, un derecho humano fundamental. Esa es la aspiración, ese es el compromiso y eso es lo que queremos garantizar en todo el país.
Por eso, desde antes de la pandemia decidimos invertir más en salud. El presupuesto de este año ya es superior al presupuesto que ejercimos el año pasado, se trata de un incremento de 40 mil millones de pesos. Todavía no imaginábamos que iba a llegar esta terrible pandemia y ya se había aprobado un presupuesto mucho mayor al ejercido el año pasado, porque para nosotros, insisto, es una prioridad el garantizar la atención médica.
Como aquí lo mencionó el doctor Alcocer, también antes de la pandemia ya habíamos visitado, estuvimos aquí en el Estado de México con el gobernador del Mazo en Ixtlahuaca, visitando hospitales del IMSS-Bienestar; antes de la pandemia se creó el Instituto de Salud para el Bienestar, el Insabi, en fin, ya estábamos empezando a prepararnos bien en la pandemia y tenemos que redoblas esfuerzos, tenemos que ampliar la infraestructura, reconvertir hospitales, que se contara con camas suficientes, con ventiladores y con especialistas.
Bueno, todo eso se ha podido hacer, primero, porque se actuó a tiempo y nos ayudó mucho la gente, el pueblo de México, sin autoritarismo, sino convenciendo. Todo mundo se resguardó en sus domicilios, nos cuidamos; sobre todo, se cuidó a nuestros adultos mayores, se evitó con esto una explosión de contagios, el que de repente, como desgraciadamente sucedió en Europa y en algunos estados de la Unión Americana, que se presentó un crecimiento desmedido de la pandemia y hubo muchos casos al grado que se saturaron los hospitales, fue muy triste, que estaban los enfermos esperando una cama para ser atendidos.
Afortunadamente, como nosotros logramos que no se difundiera, que no se esparciera, que no se expandiera el virus, que no creciera tanto la epidemia, pues se logró lo que dicen los técnicos, aplanar la curva; en vez de que se disparara así, hacia arriba, se aplanó.
Hace uno momento, el gobernador del Estado de México expresaba que, si no hubiésemos hecho esto con el apoyo de la gente, sólo en el Estado de México, en el momento más crítico se hubiesen requerido 12 mil camas de hospitalización, que no se iban a tener. Y se logró, repito, controlar esta situación bajando el número de contagios y ahora en el Estado de México, como en todo el país, se tienen camas disponibles para atender a todos.
Desde luego duele mucho lo que ha pasado porque han perdido la vida miles de mexicanos, pero también debemos de tomar en consideración que, a pesar de los efectos funestos de esta pandemia, se ha logrado salvar a muchos mexicanos, muchos mexicanos se han salvado, se han recuperado. Entonces, tenemos que seguir así, actuando de manera preventiva.
Y ahora, porque son muchos días de confinamiento, muchos días sin salir, muchos padeciendo, porque no todos tenemos asegurado un salario, hay quienes se buscan la vida en la calle, viven al día, tenemos que ir equilibrando, el cuidarnos que es lo principal, el no enfermarnos, el que no haya contagios y empezar también a salir, a recobrar a plenitud nuestra libertad, regresar a la normalidad o a lo que se ha llamado la nueva normalidad poco a poco, cuidándonos.
Ya aprendimos. Nunca nos habíamos lavado las manos tanto como en este tiempo. Ahora ya todos sabemos que es fundamental la higiene personal, ya sabemos la importancia que tiene la sana distancia, ya aprendimos a cuidarnos. Pues así, tomando esas medidas es que tenemos que regresar a la normalidad y nosotros vamos a seguir ayudando para que la crisis económica que se agravó por la pandemia la superemos lo más pronto posible.
Por eso también aquí en Texcoco vengo a informarles que continúan todos los programas de bienestar.
El día 1º de julio, en unos días más, comienza a dispersarse, a entregarse el apoyo a adultos mayores también por anticipado, cuatro meses para que nuestros ancianos respetables, nuestros adultos mayores tengan un poco de ingreso y sigan quedándose en la casa.
Que los sigamos cuidando, porque también nos ha ayudado mucho, lo digo con todo respeto a otros países, nos ha ayudado mucho que la familia mexicana tiene la costumbre de ser muy fraterna, muy solidaria, se cuida al adulto mayor, lo dije desde el principio.
A veces no gusta mucho porque, también con razón, se quiere cambiar el rol de las mujeres y eso es una de las causas, es una de las causas justas del feminismo, pero la tradición en México es que las hijas son las que más cuidan a los padres, nosotros los hombres somos más desprendidos, pero las hijas siempre están pendientes de los padres, de los papás, de las mamás.
Entonces, cuidamos, por tradición, por costumbre, porque la familia mexicana es la institución más importante de seguridad social que existe, es familia fraterna. Bueno, eso nos ha ayudado.
En otros países, que tienen otra manera de convivir, los adultos mayores permanecen más en asilos de ancianos; aquí no, aquí es en nuestras casas. Ahora con la pandemia sufrieron mucho los adultos que estaban en los asilos de ancianos, sobre todo en Europa; la costumbre nuestra de cuidar a nuestros adultos mayores nos ayudó mucho. Ese es un elemento a favor, un elemento bueno.
¿Qué nos perjudicó?
Que tenemos muchas enfermedades crónicas que se han venido padeciendo en los últimos tiempos que tienen que ver por lo general por falta de una buena alimentación. No que no haya comida, sino que se come mal, me refiero a que en los últimos tiempos ha habido más consumo de productos industrializados, refrescos, productos elaborados con mucha sal, azúcar, aceite, con hormonas, con químicos, los llamados productos chatarra y por eso tenemos muchos problemas de hipertensión.
Lamentamos muchísimo la pérdida de vidas humanas por la pandemia del coronavirus, pero también fallecen muchos por infartos en nuestro país y fallecen muchos, miles por diabetes y se padece de obesidad. Por eso también nos ha afectado la pandemia.
Ahora tenemos ya que regresar a la nueva normalidad con otra actitud, tenemos que cuidar nuestra alimentación. Y repito, no es comer productos exóticos, caros, no, es comer lo más natural que se pueda, desde luego alimentos como el maíz, como el frijol, el nopal, las frutas de temporada y evitar los productos chatarra.
Otra cosa que necesitamos también hacer es permanecer más tiempo de pie, no tanto tiempo sentados, hacer ejercicio, caminar de acuerdo a nuestra condición física, hacer deporte.
Todo esto tiene que estar ya incluido en nuestros hábitos o se tiene que convertir la buena alimentación o la alimentación nutricional y el ejercicio en hábitos que queden bien arraigados en nosotros.
Ya en la educación va a haber una materia, en la educación formal sobre educación para la salud que se va a impartir en todos los niveles de escolaridad. Vamos a reforzar esto en la educación formal y en la educación no formal, vamos a tener campañas en radio, en televisión; porque, si no, nos va a alcanzar ningún presupuesto.
No se trata de tener hospitales, no se trata nada más de curar, lo más importante es prevenir, no enfermarnos. Y eso se puede lograr.
Desde luego vamos a seguir apoyando para que se tenga ingresos para una buena alimentación, vamos a atender a todos, como siempre lo digo, vamos a escuchar a todos, vamos a respetar a todos, pero le vamos a dar preferencia por humanismo, por fraternidad a la gente humilde, a la gente más necesitada.
Me da mucho gusto por eso constatar aquí, en Texcoco, que se va a avanzando. Felicito a la presidenta municipal Sandra Luz Falcón por su trabajo. Sé que está haciendo bien las cosas, por eso aceptamos con mucho gusto la invitación de ser testigos de la firma de este convenio.
Y le tomo la palabra a Carlos Sánchez, que es de infraestructura del Insabi, le tomo la palabra de que en 15 días va a estar ya totalmente equipado el hospital, y vamos a pensar en 15 días más para que ya estén los médicos, es decir, que en un mes ya esté en operación en hospital.
Y a lo mejor, no creo que haga falta, pero a lo mejor regreso en un mes para que ya entonces sí cortemos el listón. Entonces, hago ese compromiso, porque tengo que venir también a ver una unidad deportiva aquí en Texcoco.
¿Por qué tanto afecto por Texcoco?
Porque amor con amor se paga. Aquí voy a mencionar a algo que tiene que ver con nuestra lucha. Desde hace años, pero muchos años, más de 20 años, aquí en Texcoco siempre se apoyó nuestro movimiento, todo el tiempo se recibió el apoyo de la gente, en el Estado de México en general.
Ya no puedo hablar de esas cosas porque yo ya no estoy en la oposición, ya estamos en el gobierno. Partido es, como su nombre lo indica, una parte; gobierno es todo. Ya no hay banderías partidistas, ahora tenemos que atender a todo el pueblo y garantizarle la libertad a todo el pueblo y que los apoyos lleguen sin ninguna condición, no discriminar a nadie. Así lo está haciendo el gobernador Alfredo del Mazo y así se está haciendo en el gobierno federal, atender a todos.
Ya cuando lleguen las campañas, que cada quien agarre su partido y el gobierno no se meta, y que sean los ciudadanos los que libremente elijan a sus representantes. Esa es la auténtica, la verdadera democracia.
Entonces, termino con este compromiso de que voy a regresar en un mes, que ya van a estar los médicos, las enfermeras y ya va a estar funcionando el hospital porque si no… No lo estoy poniendo en duda, Sandra Luz es muy responsable, pero ¿cómo se hacían antes las cosas o a veces? que nada más se cortaba el listón…
Como la película de Calzonzin inspector, que se las recomiendo. Cuando llevan al inspector a inaugurar un hospital y metieron hasta los enfermos, los sacaron de un gimnasio, todos así, fortachones, y ahí estaban en las camas; ya se va el inspector y se van los fortachones y se van las camas, y queda otra vez vacío el hospital.
También esto lo hacían mucho cuando inauguraban los sistemas de agua potable; casi-casi había una pipa detrás llenando el tanque y abrían la llave y aplauso; ya se iba el gobernante, se iba la pipa también y ya no había agua. Todo era pura faramalla, pura simulación.
Todavía hasta hace poco fui a un hospital en Ciudad Juárez, Chihuahua. Me llevaron porque gobiernos pasados lo inauguraron y era la pura fachada como escenografía, y adentro obra negra, y cortaron el listón y lo dejaron inaugurado; y ahí está, porque todavía lo tenemos que terminar.
Entonces, no es por eso que voy a regresar, porque no tenga desconfianza. Voy a regresar porque quiero mucho a la gente de Texcoco y además vamos a ir a inaugurar la unidad deportiva y el campo de béisbol que, por cierto, celebro que ya va a iniciar la temporada en Grandes Ligas en Estados Unidos, pero eso es otro asunto.
Me dio mucho gusto estar aquí en Texcoco. Muchas gracias de todo corazón.
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